"KILOMETRO 0"




No viajo muy seguido, pero cuando lo hago, viajo solo, aunque vaya acompañado, mi lado consciente y razonal se va doblado como un traje en la maleta. Mi lado autista toma el dominio absoluto de la situación. Me carga, por ejemplo, que me toque alguien conversador como compañero de asiento, sea en avión, en bus o barcaza, desde ya no conozco los pasillos, ventana siempre aunque sea la que esta encima del ala. Me aisló completamente, pienso en nada y dejo que mi mirada agarre vuelo y se arranque lejos, tan lejos como yo nunca me atrevería a ir, no hay miedo, siempre termina por volver. Soy alguien que emprende vuelo con los atardeceres, pero a la vez quedo completamente petrificado, como si el tiempo se detuviese, como si yo quisiera que ese momento quedara inmóvil, que todo quede inmóvil, que mi vida sea un atardecer infinito, seria la mas bella utopía, pero se desvanece junto a los primeros destellos de la cruz del sur, como si fuera un calambre de realidad. Cuando manejo y recorro grandes distancias me pierdo en el camino, el mismo que he recorrido mil veces, y esas mil veces tiene baches nuevos que maldecir, el asfalto le quita la gracia al recorrido. La estela de polvo que se esmera en alcanzar tu mecánica humanidad juega un desafió peligroso junto a la resistencia del viento dejando a su paso pequeñas chispas de roca que se esmeran en alcanzar parabrisas ajenos. Con suerte trizara algunos cuantos, como trizadas están mis pupilas de líneas rojas después de kilómetros de recuerdos olvidados y presentes sempiternos.




Voy saliendo presuroso, siempre habrá un kilómetro 0 que reanudar, salidas de madrugada que espantar con un mal café y una que otra encrucijada que sortear, mientras el alivio que dan la cifras regresivas impresas en las señaleticas a mis cansados brazos, nos recibirán como siempre inmóviles, anunciando que cada vez falta menos para llegar sin novedad al destino fijo de tener que volver a partir… una vez mas.

3 comentarios:

TICTAC dijo...

Yo tambien tengo un lado autista cuando viajo...y el otro lado 'doblado como un traje en la maleta'...jajajaja, me ha encantado tu relato, de veras me ha gustado mucho...me he identificado bastante en tus 'calambres de realidad'...wow!

un abrazo.

Que lugar tan bello a juzgar por las fotos, para perderse de veras.

LA FULERITA dijo...

Cierto, casi todos los viajes tienen un retorno, casi todos los viajes hacen que la mirada se pierda en el horizonte para posarse en el contador cuando es hora de regresar. Pero no de todos los viajes se vuelve.

Silvana dijo...

coincido contigo, me encanta viajar y tampoco soy muy buena para conversar, prefiero mirar y admirar los paisajes, soñar y volar.

saludos!!!!